Un cuerpo
sin piel
sin ojos
sin boca
una calavera
que nos toca
nos mira
nos grita
“No me olviden”
desde un charco en la acera
“No me olviden”
desde un pueblo en miseria
“No me olviden”
desde que el tiempo es tiempo
levantado
acallado
amordazado
desaparecido
humillado
lastimado
muerto
“No me olviden”.
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